5 rebadges de Ford basados en coches japoneses que quizás no conocías

Ford es una de esas marcas que no ha dudado nunca en colaborar con la competencia cuando lo ha necesitado, evidentemente no con toda su competencia (no son muy amigos de sus paisanos), pero si hablamos de su competencia del país del sol naciente, podemos encontrar numerosos ejemplos, de los cuáles hoy quiero mencionar a cinco de ellos.

El mercado asiático es un mercado complejo, quizás no tanto como el europeo, pero para competir allí se necesitan armas diferentes a las que se usan en el mercado estadounidense. Por ello, en ésta entrada vamos a ver ejemplos de cuando Ford tuvo que pedir ayuda a sus rivales japoneses para que les prestase parte de sus recursos para poder encajar mejor especialmente en el mercado asiático, aunque también vamos a hablar de ejemplos que necesitó para ser también más competitivo en el mercado europeo y australiano, así pues ¿empezamos?

1. Ford Freda. El primer ejemplo del que os voy a hablar es un modelo de Mazda del que Ford hizo un rebadged para poder hacer un poco más grande el hueco que la marca norteamericana se había hecho en el mercado japonés. El plato fuerte de Ford en dicho mercado eran sus modelos importados de Estados Unidos, pero a su gama natal no le venía nada mal complementarse con modelos que se habían diseñado para dicho mercado de forma originaria.

No podemos decir que ésta fuese la opción más inteligente, ya que en Japón son más populares los kei-cars por ejemplo (de los cuales hay muchos rebadgeds), pero supongo que la división de Ford en Japón quería que su marca fuese asociada a modelos de gran tamaño y no a coches pequeños, por ello le pidió a Mazda la versión más «molona» de su Bongo, el Bongo Friendee. Dicho modelo era un furgoneta compacta con una puerta lateral corredera (además de las dos delanteras) y un portón trasero, que se podía adquirir con un motor diésel de 2,5 litros o dos motores de gasolina; un 2.0 para l@s menos exigentes y un 2.5 V6 para l@s que buscaban algo más de fuerza. Según el motor se podía elegir entre tracción a las dos o a las cuatro ruedas, y el cambio en todos los motores era automático.

La gran particularidad del Freda, tanto en los primeros modelos que se vendieron entre 1995 y 1999, como en los restyling que se vendieron hasta 2005, es que se ofrecía de forma opcional, al igual que el Mazda Bongo Friendee, con diversas opciones para convertirla en una auténtica camper van, destacando el techo elevable e incluso una cocina.

2. Ford Ixion. Cuando Mazda estaba desarrollando su primera generación del inigualable Premacy, Ford pensó que un clon de éste le vendría bien para introducirse en diversos mercados de Asia, y así cuando en 1999 el Mazda Premacy se presentaba al mundo, también lo hacía el Ixion. Ambos compartían las mismas motorizaciones (exceptuando el motor diésel) y al principio de su vida comercial, sólo se diferenciaban estéticamente en los paragolpes y en el diseño de la carcasa de las ópticas traseras.

En el año 2002, cuando el Premacy se sometió a una ligera actualización, el Ixion se mantuvo casi inalterado en la mayoría de mercados salvo en Tailandia, dónde sí se le dotó de un diseño frontal y trasero específicos, además de añadirle a su nombre la denominación «Mav».

Es importante destacar que cuando en 2005 el Premacy se retiraba del mercado, y con él, el Ixion (en los pocos sitios dónde se comercializaba ya por entonces), fue sólo el mercado Tailandés el que quiso lanzar un sustituto con la plataforma del nuevo modelo que cogía en Mazda el testigo del Premacy (también llamado Premacy o más conocido como 5). Dicho modelo se denominó I-max, y si bien también podría haber estado en ésta lista, me ha parecido más interesante incluir al Ixion por haberse comercializado en más países de lo que lo hizo su sustituto, que sin duda fue ligeramente más anónimo.

3. Ford Telstar. Éste modelo al igual que los otros dos mencionados hasta ahora también tomaron como base a un modelo de Mazda, pero en éste caso a uno de los más populares, el gran 626, y a diferencia de los otros dos, el Telstar se ofrececió en hasta cinco generaciones, empezando en 1982 y terminando en 1999, dónde abasteció al mercado africano, australiano y por su puesto gran parte del asiático.

Éste modelo se ofreció en casi todas las carrocerías que ofreció el 626 (digo casi todas porque no hubo una variante coupé) y con la gran mayoría de motorizaciones que se encontraron en el catálogo de éste. Es importante destacar que en sus dos primeras generaciones, disfrutaron de ópticas propias tanto en su frontal como en su trasera, pudiéndose diferenciar más del modelo del que partía.

En las otras tres generaciones posteriores las diferencias se mermaron, pero aún así casi todos los Telstar disfrutaron de su cierta identidad propia. Se podría decir que el Telstar en general cumplió bien su cometido en los mercados a los que llegó, dotando a Ford de una berlina de tamaño medio más orientada a los gustos de dichos mercados. Para mediados la década de los noventa, el Telstar tenía fecha de caducidad, y en los mercados dónde Ford lo vio necesario, fue sustituido por el Mondeo, aunque se estuvo produciendo hasta finales de la década.

4. Ford Corsair. A diferencia de los otros tres ejemplos, el Corsair fue fruto de una colaboración con un fabricante japonés que no era Mazda, sino que en éste caso el protagonista fue Nissan. Éste ejemplo en especial, es muy curioso, porque a diferencia de los otros tres modelos que hemos visto, no nacía para cubrir un nicho de mercado determinado, sino que se lanzaba para competir con un modelo directo de la propia gama de Ford por entonces, el recién mencionado Telstar.

A finales de los ochenta una gran parte de la producción del Telstar se realizaba en Japón, y otra parte en Australia, y para reducir los gastos de importaciones, en la división australiana de Ford pensaron que otro modelo japonés de otra marca que fuese similar al Telsar podría ser más rentable, y por eso llegaron a un acuerdo con Nissan para dar como resultado el Corsair, que recuperaba el nombre de un ilustre Ford de la década de los sesenta para hacer un rebadged del Nissan Pintara, que era una versión del Nissan Bluebird, y así ofrecerlo con los dos tipos de carrocería con los que se ofrecía el modelo originario.

Éste modelo formó parte de un plan que hizo el gobierno australiano para impulsar la industria automotriz local y que se bautizó como «plan button», un plan dónde Nissan y Toyota colaboraron con las dos marcas locales australianas (la división Ford de allí y Holden) para desarrollar varios rebadgeds.

Pero la gloria del Corsair duró poco, pues cuando rivalizas a dos modelos de las mismas características siempre hay uno que sale muy mal parado, y en lugar del Telstar, como planeaba Ford, fue el Corsarir el que perdió el duelo, registrando un muy reducido número de ventas en el penúltimo año de producción.

Eso hizo que la propia Nissan decidiese cerrar la planta de Clayton en 1992, cesándose así con ella la producción del Corsair, que se despedía del mercado con tan sólo tres años de carrera y dejando perenne así el título de representante de Ford en éste segmento al Telstar hasta que fue sustituido por el Mondeo a mediados de los noventa, como bien he mencionado más arriba.

5. Ford Maverick. Éste es sin duda el caso más interesante de todos, ya que el nombre de Maverick se ha usado en Ford tantas veces y en tantas épocas distintas que puede conducir sin lugar a dudas a confusión. La primera vez que Ford lanza un modelo con éste nombre es en la década de los setenta para identificar a un compacto de precio competitivo en Estados Unidos. Éste modelo tendría un sustituto que se identificaría bajo otro nombre distinto, por lo que el nombre de Maverick se guardaría en el cajón de Ford para no volver a salir hasta finales de los ochenta, dónde se usaría para nombrar a un rebadged del Nissan Patrol que formaba parte del «Plan Button» en Australia, mencionado más arriba, y que se fabricaría en dicho país hasta poco antes de mediados de los noventa.

Pero un año antes de que el Maverick australiano se despidiese, en 1993, se lanzaba en Europa el Terrano y el rebadged de Ford que portaría el mismo nombre que el modelo australiano, y que se fabricaba en la planta española de Nissan en Barcelona. El Maverick europeo se lanzó con vistas a que Ford pudiese ofrecer un todocamino algo más modesto que el Explorer que venía a cuenta gotas de Estados Unidos, y se ofreció con las dos mismas carrocerías que tenía el Terrano original, tanto con tres como con cinco puertas.

Hasta el año 2000, el Maverick y el Terrano estuvieron compartiendo el mercado europeo de forma armoniosa, año en el que el Maverick se despedía para dejar vía libre al Terrano, que se mantuvo en venta hasta nada más y nada menos que el año 2005, sometiéndose en éste periodo a pocos cambios.

El nombre de Maverick no estaría mucho tiempo sin usar después del año 2000, pues tan sólo un año después, en 2001, volvería a usarse para identificar a la versión europea y china del Ford Escape de primera generación, que particularmente en Europa no llegó a muchos mercados debido a que se comercializaba también su hermano gemelo de Mazda, el Tribute (aquí podríamos tener otro ejemplo de reabdged pero no tan interesante). Y después de éste caso, el nombre Maverick no volvería a usarse hasta el año pasado, cuando Ford quiso usarlo en un pickup compacto para su mercado local, que ha resultado ser un modelo bastante interesante.

Aquí terminamos con éstos cinco ejemplos, ¿Cuál os ha gustado más?, ¿los conocíais todos? ¿o a caso os hubiese gustado ver otro modelo en particular en éste lista? Como siempre, estáis invitad@s a dejar vuestras respuestas.

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